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8 mitos falsos sobre la visa de trabajo en EEUU


Cuando se habla de obtener una visa de trabajo en Estados Unidos, muchas personas de Latinoamérica tienen ideas preconcebidas que no siempre se ajustan a la realidad.

Desde confusiones sobre los requisitos hasta falsas expectativas sobre los tiempos de espera, existen muchos mitos que pueden generar frustración o confusión durante el proceso de solicitud.

En esta guía, vamos a desmitificar las 8 creencias más comunes y proporcionar una visión clara de lo que realmente necesitas saber para obtener una visa de trabajo en EE.UU.

Es importante recalcar que una vez tengas esta información acudas a espacios gubernamentales u organizaciones o a abogados especializados en inmigración para tener la información clara y precisa sobre los pasos que debes dar en tu caso particular.

Entender el proceso, los requisitos y las limitaciones reales es crucial para aumentar las posibilidades de éxito en tu solicitud. Y si bien esta guía desmitifica algunas de las creencias más comunes, ofreciendo una visión clara y realista de lo que realmente se necesita para obtener una visa de trabajo en EE.UU., no presenta la información en toda su extensión y profundidad.

Recuerda, primero leer esta guía, romper mitos y falsas creencias; segundo acudir a los organismos, organizaciones o profesionales que te ayudan, asesoran y preparan en tu caso particular.

Mito 1: «Solo los profesionales altamente cualificados pueden obtener visas de trabajo»

Realidad:

Aunque existen visas específicas para profesionales con altos niveles de educación y experiencia, como la H-1B o la L-1 (transferencias internas de empresas), hay otras opciones disponibles para trabajadores temporales no especializados.

Por ejemplo, las visas H-2A y H-2B permiten a trabajadores agrícolas y no agrícolas realizar trabajos temporales en EE.UU. durante ciertas temporadas.

Esto demuestra que el mercado laboral de Estados Unidos tiene necesidad de todo tipo de trabajadores, no solo aquellos con formación avanzada.

​Fuentes:


Mito 2: «Es muy fácil encontrar empleadores dispuestos a patrocinar visas»

Realidad:

Aunque existen empleadores que patrocinan visas, no es tan simple como presentar una solicitud de trabajo.

Las empresas que patrocinan visas, como las de H-1B, deben demostrar que no pudieron encontrar trabajadores locales cualificados para el puesto, lo que añade un paso adicional al proceso de contratación.

Además, el número de visas disponibles está limitado por cupos anuales. En algunos casos, como la H-1B, la demanda supera ampliamente la oferta, lo que hace que muchas solicitudes no sean seleccionadas​

Fuente:


Mito 3: «Si tienes una visa de trabajo, puedes cambiar de empleador libremente»

Realidad:

La mayoría de las visas de trabajo, como la H-1B, están vinculadas a un empleador específico. Si deseas cambiar de trabajo, el nuevo empleador debe patrocinar tu visa. En algunos casos, esto puede implicar iniciar el proceso desde cero.

Sin embargo, en situaciones de maltrato o condiciones laborales injustas, ciertos programas permiten la transferencia sin perder el estatus migratorio, pero esos casos requieren una evaluación exhaustiva y procedimientos adicionales.

Fuente:


Mito 4: «Una visa de trabajo te da automáticamente el camino a la residencia permanente»

Realidad:

Obtener una visa de trabajo no garantiza la residencia permanente (la Green Card). Algunas visas, como la H-1B, pueden abrir la puerta a futuras solicitudes de residencia, pero no todas las visas lo hacen.

Las visas temporales, como las H-2A o H-2B, no están diseñadas para llevar directamente a la residencia.

Para quienes buscan una estancia más prolongada o permanente, es importante planificar con anticipación y explorar vías como las visas de inmigrante por empleo (EB-1, EB-2, EB-3)​.

Fuente:


Mito 5: «El proceso de obtención de una visa es rápido y sencillo»

Realidad:

El proceso de obtener una visa de trabajo puede ser largo y complicado, especialmente en el caso de visas altamente demandadas como la H-1B.

Además de la petición del empleador ante el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU. (USCIS), el solicitante debe pasar por controles de seguridad y obtener una cita en un consulado o embajada para la entrevista de visa, lo que puede generar tiempos de espera considerables. En algunos casos, el proceso puede durar varios meses.

​Fuente:


Mito 6: «Las personas que ingresan a EE.UU. con visa de trabajo están protegidas contra despidos»

Realidad:

Tener una visa de trabajo NO garantiza la protección contra el despido.

Si un trabajador con una visa como la H-1B es despedido, generalmente tiene 60 días para encontrar un nuevo empleador que patrocine su visa o debe abandonar el país.

Esta situación puede ser especialmente difícil en industrias volátiles donde los despidos son frecuentes.

​Fuente:


Mito 7: «Si se rechaza mi visa, no hay nada más que pueda hacer»

Realidad:

Aunque un rechazo puede ser desalentador, no es necesariamente el final del camino. En muchos casos, los rechazos de visa se deben a documentación incompleta o errores en la solicitud, que pueden corregirse y volverse a presentar.

Además, algunos solicitantes pueden calificar para otro tipo de visa que no hayan considerado previamente. Consultar con un abogado especializado en inmigración puede ayudar a explorar otras opciones.

Fuente:


Mito 8: «Puedes trabajar legalmente en EE.UU. mientras esperas la aprobación de tu visa»

Realidad:

A menos que ya tengas una autorización de empleo aprobada, no puedes comenzar a trabajar legalmente en EE.UU. solo por haber solicitado una visa de trabajo.

Comenzar a trabajar sin autorización válida puede poner en peligro tu solicitud de visa y podría llevar a sanciones, incluida la deportación .

Fuentes:


ADVERTENCIA:

abogados(de)USA es un directorio de despachos y profesionales que atienden a sus clientes en español en los Estados Unidos. Además ofrece en sus guías orientación e información que puede resultar útil a la hora de buscar, elegir y contratar a un abogado pero que nunca sustituye la consulta con un profesional; así como historias y casos que pueden servir de inspiración y motivación para dar el paso en la defensa de los derechos propios. En resumen, somos un portal de información.



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